El mundo de la administración de fincas cuenta con una gran demanda, más de lo que te pudieras imaginar ya que genera una buena posición económica, y su función envuelve un trabajo muy significativo con un gran servicio a la comunidad.
Desde el “quédate en casa” y la cuarentena, muchos servicios entre otros nosotros, los abogados, nos vimos obligados a añadir el teletrabajo a nuestras rutinas de trabajo, algo que nunca pensaríamos incorporar. Esta forma de trabajo nunca ha sido planteada para un despacho de abogados, pero aquí se demuestra que la eficiencia y productividad de un abogado no depende de cuantas horas se quede en el despacho o a la hora que llegue a casa.
El teletrabajo, se ha impuesto a raíz de la cuarentena pero ahora se va a quedar como una opción más de trabajo, para los abogados el teletrabajo hace que tengan que entregar una mejor experiencia al cliente. A ademas de integrar la tecnología al espacio de trabajo para en algún momento prescindir de los espacios físicos.
El coronavirus ha creado una crisis, las crisis generan conflicto y los abogados son los que participan y median en la solución de ellos, y por eso los despachos jurídicos se han activado mucho. Por otro lado las crisis nos ayudan a conocer y controlar más este tipo de problemas en un futuro.
La pandemia ha creado una gran crisis pero, para los abogados se ha creado una gran oportunidad para adaptarse a los tiempos de ahora, que destacan por la innovación de la tecnología en las empresas, pero manteniendo la tradicional dignidad de la profesión.
Por otro lado esta parte del derecho, cuenta con mucha competencia. La administración de fincas es un área que cuenta con mucha responsabilidad social, a pesar de esto, esta profesión actualmente esta en continuo crecimiento ya que en las ciudades pco a poco se concentran más fincas.